9 de octubre de 2011

LA VOZ DE LOS PADRES

TEXTOS PARA EL TIEMPO ORDINARIO
Domingo 28º del Tiempo Ordinario

San Juan Crisóstomo, obispo, Comentario a Filipenses
Los que obran adecuadamente, cuando ven que uno no acoge bien lo que recibe, sino que muestras desprecio por las cosas que le son confiadas se volverán más negligentes. Para que esto no suceda, ni ninguno pueda afirmarlo, mira como una vez más Pablo cuidó este punto. Así, por las cosas dichas, había constreñido sus espíritus. Por los que a continuación enciende sus ánimos… ¿Entonces, de qué modo fueron partícipes de sus tribulaciones? Por esto: porque incluso estando encadenado decía: «todos vosotros sois participantes de mi gracia». Pues gracia es padecer por Cristo. Y no dijo: «los que dan», sino «los que participan», mostrándoles que también obtendrán su fruto, puesto que fueron partícipes de sus trofeos. No dijo: los que hicieron leves mis padecimientos, sino «los que participaron en mi sufrimiento», lo que era más digno.